Los de Pellegrini jugaron con diez desde el 30' por una rigurosa roja a Edgar González; el encuentro no tuvo color y el Barça acabó arrollando al Betis, que finalizó con nueve.
El Betis de Pellegrini cayó ampliamente goleado en el Camp Nou en un duelo marcado por la temprana y rigurosa expulsión de Edgar González, cuando el Barça ya iba por delante en el luminoso. Christensen, Lewandowski, Raphinha y Guido en propia puerta anotaron los cuatro goles del equipo de Xavi Hernández.
El partido entre culés y verdiblancos no tuvo color. Los azulgranas, que fueron ampliamente superiores, aprovecharon una rigurosa expulsión de Edgar González a los 30’ de encuentro, cuando ya iban 1-0, para dominar de cabo a rabo el transcurso del duelo. Los de Pellegrini, quienes comenzaron siendo inferiores, vieron además cómo Luiz Felipe se lesionó muscularmente al inicio, por lo que se tuvo que retirar en el 10’. Acto seguido, el recién recuperado Christensen puso el 1-0 (14’) gracias a la pasiva zaga bética y un medido centro de Raphinha. Justo en ese momento, tras el tanto culé, el Betis se estiró, controló el balón y amenazó con un par de disparos por parte de Luiz Henrique (21’) y Willian José (30’), aunque sin especial peligro.
Pese a la buena respuesta de los verdiblancos, la victoria del Barça prácticamente se certificó con la rigurosa cartulina roja mostrada por Del Cerro Grande a Edgar -que sustituyó a Luiz Felipe- en el minuto 30 por un pisotón a Pedri. Con uno más y por encima en el marcador, los de Xavi controlaron a su antojo a los sevillanos y obtuvieron el 2-0 en botas de Lewandowski a centro de Koundé y el tercero gracias a Raphinha, que definió plácidamente en el mano a mano frente a Rui Silva.
Ya en un duelo sin competitividad alguna y completamente decidido, el FC Barcelona apretó el acelerador en algunos tramos y, frente a un Betis que solo intentaba que la sangría no fuera mayor, tuvo en Lewandowski tres ocasiones claras (50’, 57 y 75’), aunque el polaco no acertó. Sí lograron los azulgranas el cuarto tras un centro de Ansu Fati y el despeje hacia su propia portería de Guido, ante el que Rui Silva no pudo hacer nada. Joaquín abandonó el césped lesionado -dejando al Betis con 9- y Lamine Yamal estuvo cerca de anotar el quinto; Rui Silva respondió y evitó que la sangría fuese mayor aún.