El Athletic logró acortar distancias gracias a un incomprensible penalti señalado por Soto Grado; los bilbaínos mantuvieron un buen ritmo y sometieron al Betis para llevarse el choque.
El Betis de Pellegrini cayó en San Mamés en la tercera jornada liguera en un encuentro repleto de polémicas, decisiones erróneas y goles. Vesga con dos penaltis, Guruzeta y Unai Gómez pusieron los tantos rojiblancos, mientras Willian José e Isco Alarcón, los visitantes.
La ‘Catedral’ vivió una alocada primera parte. El conjunto verdiblanco impuso un espléndido fútbol al comienzo que le permitió ponerse 0-2 por delante a los diez minutos. Willian José tras una buena combinación entre Roca y Ayoze y luego Isco Alarcón con un tiro cruzado a la escuadra después de una buena transición de Aitor Ruibal ponían a los béticos en ventaja rápidamente.
No obstante, el Athletic comenzó a llevar el dominio del duelo, Vivian disparó al larguero (12’) y más tarde Soto Grado pitó un inexplicable penalti de Rui Silva sobre Nico Williams, claramente en fuera de juego, excepto para el VAR, que le situó misteriosamente en línea pese a la claridad de las imágenes. Vesga transformó el penalti (30’) y luego marcó otro para situar el empate (44’), pues Guido derribó claramente a Nico Williams en el área y Soto Grado, revisión mediante, no dudó en señalarlo. Al borde del descanso, Guruzeta confirmaba la remontada gracias a un errático despeje de Pezzella y un incisivo centro tenso de Iñaki Williams.
En el segundo acto, ambos conjuntos disminuyeron el ritmo, el Betis no supo reaccionar, apenas intimidó a los leones y los bilbaínos cerraron la contienda con el gol de Unai Gómez (84’) al contragolpe. Los de Pellegrini pecaron de falta de profundidad, verticalidad y no hicieron méritos para conseguir un empate que llegó, en gran parte, gracias a una polémica -e inexplicable- decisión desde la sala VOR.