El Betis paga los platos rotos en Old Trafford
El ritmo vertiginoso y la pegada del United, rabioso tras el 7-0, sentenciaron a un Betis que no estuvo a la altura del duelo.
El ritmo vertiginoso y la pegada del United, rabioso tras el 7-0, sentenciaron a un Betis que no estuvo a la altura del duelo.
El Betis de Pellegrini vio cómo el Manchester United le superó con creces en la ida de los octavos de final. Los verdiblancos, que en la primera parte plantaron cara, sucumbieron al endiablado ritmo de los ingleses, quienes generaron ocasiones de todo tipo, impusieron su fútbol y pudieron obtener una goleada de mayor diferencia.
Pese a la cantidad de goles encajados, la estrepitosa caída bética no fue solo una cuestión de errores propios, que también, tal y como Pellegrini ha señalado en rueda de prensa, sino que los 'red devils' mostraron su mejor nivel en el césped. No deja de ser mera lógica, pues el Betis no cuajó un buen partido en líneas generales y le faltó un punto de precisión, además de solidez defensiva, mientras que el United, claro favorito, estuvo francamente inspirado, lo que dio pie a la diferencia en el luminoso.
Bruno Fernandes, Rashford, un incomensurable Fred, Casemiro, Antony... una serie de futbolistas al nivel de los mejores que no permitieron a los béticos escaparse vivos de Mánchester. Los de Pellegrini cuajaron una pobre actuación, y es evidente que la noche da lugar a autocrítica, pero la rabia de los diablos rojos tras caer 7-0 fue incontenible para un Betis que, en realidad, aún no está para derribar a un muro como el de Ten Hag, dispuesto a ganar la competición.