Las gradas y los edificios para vestuarios y oficinas, así como el drenaje de los campos y la instalación de tuberías ya se han realizado. Falta sembrar el césped natural y poner el artificial, así como asientos en las gradas y cubiertas. Para el próximo mes de junio debe estar operativa
Las obras de la nueva ciudad deportiva del Real Betis marchan a muy buen ritmo y para el próximo mes de junio debe estar acabada la primera fase de las mismas, que arracaron el pasado el 19 de julio y en la que se construyen diez campos de fútbol 11 (cinco de ellos de césped natural), más dos campos específicos para los porteros, así como gradas, vestuarios, gimnasios, servicios médicos y salas de reuniones, almacenes y control de accesos, además un aparcamiento en superficie para mil vehículos.
Muchas de esas gradas -bajo las que se ubican vestuarios, salas técnicas y almacenes- y edificios ya están construidos, así como el drenaje de los campos y el sofisticado sistema de tuberías para el riego, tal y como puede apreciarse en las imágenes aéreas que nos envía el piloto @PLATeleLE. A partir de ahora, hay que ir rematando, sembrar el césped natural, poner el artificial, los asientos, cubiertas, etc-.... para que en el mes de junio la nueva ciudad deportiva ya pueda estar operativa, tal y como esperan en el club.
Las obras se están ejecutando a buen ritmo por la empresa Acciona gracias aun préstamo del Banco Europeo de Inversiones (a devolver en 15 años) y esta primera fase tiene un coste de 26,5 millones de euros, sin IVA. En total, la ciudad deportiva ocupará una parcela de 51 hectáreas que la convertirán en una de las mayores de Europa.
El Betis utilizará la antigua casa-club, un edificio ya construido (la zona iba a albergar hace años un campo de golf) de más de 2.000 metros cuadrados, que será rehabilitado como zona de oficinas y centro médico. Están previsto también aparcamientos con capacidad para 1.500 coches y 20 autobuses, además de tres entradas al recinto.