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Real Betis
Sergio Canales está a punto de abandonar el Real Betis para marcharse al Rayados mexicano que, a sus 32 años y padre ya de familia numerosa -sus tres hijas son sevillanas-, le ofrece un contrato irrechazable que le ayudará a resolver la vida de toda su prole tras una larga y tortuosa carrera, marcada por tres gravísimas lesiones que ha dejado atrás a fuerza de tesón y voluntad y le han convertido en todo un ejemplo de superación ante la adversidad.
El fichaje de Sergio Canales, que llegó al Real Betis en el verano de 2018 por recomendación y mediación expresa de su paisano Quique Setién, ha sido sin duda uno de los más rentables de la historia del Real Betis Balompié. Llegó a coste cero, ha brindado los cinco mejores años de su carrera profesional y se va a ir dejando un buen puñado de millones en las arcas verdiblancas, como ya hicieron, por cierto, varios más que pasaron por las manos de Quique, casos de Fabián, Junior, Pau López o Lo Celso.
Quitando a Cristiano Ronaldo, los jugadores con más de 32 años traspasados a lo largo de la historia por más de 15 millones de euros se pueden contar con los dedos de una mano: Lewandowsky, Koulibay, Griezmann, Claudio Bravo y Fernando Llorente.
Canales hace semanas que está convencido de que aceptar la millonaria oferta mexicana es lo mejor para el futuro de su familia y aguarda paciente a que Rayados cierre un acuerdo ventajoso con el Real Betis, que ha hecho lo que tenía que hacer, tratar de sacar en mayor rédito posible a la operación y abrirle las puertas de salida al cántabro, al que prepara un homenaje de despedida por todo lo alto antes de partir hacia México, una vez queden resueltos los últimos detalles de la operación.
Sin duda que se hará muy extraño a los béticos ver comenzar la próxima temporada sin el concurso de los magos Canales y Fekir, al que no se espera hasta mediados de octubre por lo menos, pero es lo que toca en estos momentos, a la espera de que la direccion deportiva que comanda Ramon Planes -tarea ardua la suya- sea capaz de realizar las operaciones necesarias para mejorar el plantel a la vez que se reduce la deuda en un verano que llega cargadísimo de movimientos en verdiblanco.