Dada la penosa marcha del Chelsea en la Premier League, en enero Todd Boehly decidió romper la bolsa con el mayor gasto en fichajes dentro de un mismo mercado. No dio resultado, y para que no vuelva a pasar lo mismo, este verano ha ampliado ese desembolso por encima de los 500 millones de euros en 8 meses.
Este viernes, los 'blues' confirmaron el fichaje de Axel Disasi. El central de 25 años aterriza en Londres procedente del Mónaco, donde ha jugado 129 partidos con 12 goles en las últimas 3 temporadas. La idea del Chelsea era reemplazar la dura baja de Wesley Fofana, afectado por otra dura lesión de rodilla, y confía en que el internacional francés eleve el nivel de su zaga.
Disasi firma hasta 2029 y ficha a cambio de 45 millones de euros. Una cantidad que eleva a 513.5 lo que se ha gastado el propietario 'blue' desde esa histórica ventana de enero. Entonces, el Chelsea se dejó 329.5 'kilos'. En poco más de un mes de mercado de verano, con la llegada del central eleva su gasto hasta los 184. Si contamos el global de la 'era Boehly', el total es de 795.49, a 37.88 de media por fichaje.
Ojo, y no contamos lo que pudo gastar entre el 'clausulazo' y la rescisión de Graham Potter, lo que ampliaría también los números del equipo londinense. Entonces, con el inglés aún en el banquillo, el Chelsea se reforzó con Enzo Fernández (121 millones), le arrebató a Mykhaylo Mudryk al Arsenal (70), también fichó a un central monegasco como Benoît Basiadhile (38) y al extremo Noni Madueke (35). A eso se unieron Malo Gusto (30), que permaneció cedido hasta fin de curso en el Olympique de Lyon; Andrey Santos (12.5), quien de igual forma permaneció en Vasco da Gama; y David Fofana (12). Y la cesión de Joao Félix le costó 11 'kilos' adicionales.
Ahora, Axel Disasi se suma a una nómina de fichajes en la que se encuentran Christopher Nkunku (60), Nico Jackson del Villarreal (37), el mediocentro del Rennes Lesley Ugochukwu (27) y el extremo Ângelo (15), de Santos. Los 'blues' tratan de reequilibrar una plantilla que el curso pasado se vio claramente descompensada. Consecuencias de la salida de Roman Abramovich y su mano derecha, Marina Granovskaia.
Eso sí, el Chelsea al menos ha intentado cuadrar cuentas este verano. Mientras que el balance en invierno fue negativo (-318.2) tras cerrar solo la venta de Jorginho, en este aún tiene margen. De momento ha ingresado 253.9 millones, lo que arroja un positivo de 69.9. Así ha sido tras las salidas de jugadores importantes como Kai Havertz (75), Mason Mount (64.2), Mateo Kovacic (29.1) o Edouard Mendy (18.5). Bajas de futbolistas significativos que indican la necesidad de renovación que había dentro del vestuario londinense.
Otras operaciones que también ha cerrado el Chelsea son las salidas de Christian Pulisic (18 millones) y Loftus-Cheek (16) al Milan, la de Koulibaly al Al-Hilal (23) o la venta de Ethan Ampadu al Leeds (8.1). E incluso ha aligerado dejando ir libres a N'Golo Kanté, César Azpilicueta y Pierre-Emerick Aubameyang. También a 'pesos' antiguos como Abdul Rahman Baba y Bakayoko, al que había estado cediendo repetidamente en los últimos años.